martes, marzo 09, 2010

Deseos felices

Leyendo el Blog de Morgan, me di cuenta de algo: no sabemos ser felices.

Y no es una crítica a lo que ella escribió, sino algo que resonó en mi mente. Acostumbro a ser una mujer muy ocupada, con priridades varias y claras. Ahora el mundo se mezcló, y no es culpa del terremoto. No sé qué prefiero; hacer muchas cosas, mantener mi mente ocupada de mi mente, de mis pensamientos, de los deseos de mi inconciente, o estar sobrada de tiempo - como ahora - para pensar y reflexionar. La verdad es que me busco cosas que hacer dentro de mis capacidades. 

Hoy me alarmé. Tomé un libro de Derecho Penal, el que más me gusta y el que más he leido; el que ispiró toda mi idea de tesis. Pero no sucedió nada, hasta me dieron ganas de llorar. ¿Será falta de confianza? ¿Será que el mundo se me estremeció a tal nivel que  las cosas que antes disfrutaba ahora no significan nada para mi?

Lo único que me dio una alegría exorbitante fue ver House después de tantas semanas. Ver cómo se desarrolla la vida de alguien en demasía amargado me alegró. Qué irónico.
Después de ver el capítulo, mi mente sólo tuvo espacio para deseos feciles. Empecé a pensar en todos mis conocidos que la están pasando mal, por diferentes razones. Y ellos sí tratan de mantener su mente y cuerpo ocupado en actividades que tienen sentido.

Esta semana al menos será mas entretenida. Mi pololo está de cumpleaños el Jueves, y me da mucha ilusión verle feliz; es lo que más quiero. Veré a alguna gente, aunque ultimamente desconfío de mi sombra pero ya es tiempo de que la suspicacia se quede como siempre estuvo, en mi mente, trabajando rápida y arduamente para desenvolverme en la vida; algo que muchas personas admiran de mi y que yo sé que sólo es un mecanismo de defensa. Por que si House se esconde del mundo, creo que todo el mundo lo hace de diferentes maneras, y con pocos podemos ser quien realmente somos.

A mi madre le asusta que ciertos positivismos que pueda llegar a obtener los saque de lugares tan poco usuales, pero a mi me da igual. Cuando a uno no lo motiva casi nada en la vida, es mejor sacar fuerzas de algo que puede parecer estúpido a que la alegría no llegue; y que llegue aunque dure 45 minutos y estés dos horas absorta pensando en lo que esas cosas significan para ti (Está temblando).

Y para Morgan algo que compartimos: Desolé y deseos felices. Nos entendemos sin siquiera saber qué nos pasa en la vida...

1 comentario:

Erendis dijo...

Yo entiendo mi tristeza, y sé como volver a ser feliz... sólo que no es algo que dependa de mí. No sé ser feliz con la cantidad de cosas que he vivido y con la poca autoestima que me tengo... pero de que tengo la receta, la tengo.
Besos, abrazos, apapachos y nanaes de cuello mi niña, fue nice verte el viernes a pesar que el krrete donde el Nico estuvo muy chstoso.
Te adorooooo
Erendis